La función de una alarma no es sólo alertarte a ti o a los servicios de emergencia cuando algo va mal. También juegan un papel crucial en la prevención de delitos.

¿Cómo? Bueno, para empezar, la presencia de una alarma visible puede hacer que los ladrones lo piensen dos veces antes de intentar entrar en tu hogar. Nadie quiere correr el riesgo de ser atrapado, y una alarma aumenta significativamente ese riesgo para cualquier intruso.

Además, muchos sistemas de alarma incluyen carteles o pegatinas para mostrar en tu propiedad, lo que anuncia a cualquier persona con malas intenciones que tu hogar está protegido. Estos signos disuasorios pueden ser muy efectivos para mantener a los ladrones alejados.

Por último, pero no menos importante, los sistemas de alarma con capacidad de monitoreo pueden proporcionar un rápido tiempo de respuesta en caso de un intento de robo, lo que puede disuadir a los ladrones de seguir adelante con su plan.

En resumen, las alarmas residenciales no sólo son herramientas de respuesta, sino también potentes armas de prevención. Un hogar seguro es un hogar preparado.